Uno de los síntomas más frecuentes y molestos que presentan las personas que
acuden regularmente a diálisis es la aparición de calambres. Consisten en la aparición de una contracción muy dolorosa de los músculos de manera totalmente involuntaria, es decir, sin que
la persona quiera realmente contraer ese músculo. En esta entrada
hablaremos de los motivos por los que son mucho más
frecuentes en las personas en diálisis y qué podemos hacer para prevenir su aparición.
¿ Por qué
aparecen calambres ?
En la población general la aparición de calambres se relaciona con la realización de ejercicio físico ( sobre todo durante y
después de la actividad física) y está provocado por alteraciones en
la concentración de potasio, calcio, magnesio u otros elementos, o bien debido a deshidratación. Todos hemos visto a algún corredor de maratón en ocasiones tener que
pararse súbitamente debido a un intenso
calambre en la pierna o a algún ciclista en una larga etapa
alpina del Tour de Francia presentar problemas por calambres en la subida al último puerto.Los aficionados al tenis habrán visto a Rafa Nadal comiéndose un plátano durante los descansos, precisamente para
recuperar los niveles de potasio en su organismo y evitar la aparición de calambres.
Otras causas menos frecuentes de aparición de calambres especialmente por la noche son :
- uso de diuréticos, laxantes, que tomados
en exceso pueden disminuir los niveles de potasio.
- embarazo, por disminución
de niveles magnesio en sangre.
- alteraciones a nivel neurológico
(por ejemplo enfemedad de Parkinson, alteraciones en una raíz nerviosa, es decir, en el comienzo del nervio a nivel de
la columna)
- pueden aparecer en personas que se encuentran sentadas
durante largos periodos de tiempo sin moverse.
- son algo más frecuentes en personas con
diabetes, alcoholismo, hipotiroidismo...
¿ Por qué
aparecen calambres en diálisis?
En las personas con insuficiencia renal que acuden a
dializarse la aparición de calambres es bastante
frecuente y obedece a otras causas diferentes a las mencionadas anteriormente.
En este caso se debe fundamentalmente a la rápida
eliminación de líquido del organismo que tiene lugar durante el proceso de
diálisis lo cual condiciona que llegue poco volumen de sangre a los
músculos desencadenado su
contractura y dolor. Dicho de otra manera, si una persona acude a dializarse
con una gran sobrecarga de líquidos y hay que eliminarlo de
manera rápida, será bastante probable que al poco rato acabe apareciendo el
calambre.
Otro factor que puede favorecer su aparición es el empleo de líquidos de diálisis con un bajo contenido en sodio. Cuando hablamos del
tema de la sal, ya mencionamos
que una dieta rica en sal favorecía la subida de la tensión arterial. Pues bien, en el baño de diálisis (el líquido que limpia la sangre) si empleamos concentraciones
altas de sodio, pasará lo mismo, la persona tendrá sed, beberá agua y su tensión arterial se incrementará.
Sin embargo el empleo de concentraciones muy bajas de sodio puede ser útil para bajar los valores de presión arterial, pero
puede favorecer la aparición de calambres, por lo que
habrá que mantener una concentración de sodio ajustada e individualizada a cada persona que
evite las dos situaciones previamente descritas.
¿ Qué
se puede hacer para prevenir su aparición?
Lo más importante será evitar ganancias de líquidos excesivas entre una diálisis y otra, siendo para ello básico realizar una dieta sin sal para evitar la sensación de sed y que, por tanto, la persona tenga necesidad de
tomar líquidos, que ya se trató en la entrada sobre líquidos en diálisis. Como
hemos comentado previamente, si hay que extraer mucho volumen muy rápidamente es bastante probable que acaben apareciendo al final
de la sesión, calambres.
Además, ante la aparición repetida de calambres durante varias sesiones de diálisis, el personal sanitario debe estar alerta, ya que ésto nos indica que algo no está yendo bien. Es probable que se deba subir el peso final
programado (peso seco) de diálisis, porque estemos quitando
demasiado líquido y aparezcan de esta manera
calambres y mareos. O puede suceder que la concentración de sodio en el líquido de diálisis sea demasiado baja y haya que incrementarla. En cualquier caso la aparición
repetida de calambres no debe considerarse normal y siempre nos indicará
que hay algo que debemos modificar.
¿ Qué
hacer si aparece un calambre durante la sesión
de diálisis?
Si aparecen calambres durante una sesión de diálisis habrá que tomar las siguientes medidas:
- en primer lugar, proporcionar a la persona una superficie
rígida de apoyo para estirar la
pierna y poder descontracturarla (puede ser útil
una garrafa llena con líquido). Evidentemente con el pie en el aire no podremos
estirar el gemelo, y dado que no se puede levantar al encontrase
conectado a la máquina puede ser útil esa superficie rígida o cualquier otra. Asímismo, masajear la zona contracturada es una medida eficaz
para relajar el músculo y disminuir el dolor.
- será muy importante comprobar que
la persona no presenta valores de tensión arterial bajos coincidiendo
con la aparición del calambre. En ese caso,
deberán tomarse medidas para
incrementarla como son: suspender la extracción
de líquido durante la diálisis y si es necesario administrar suero
- en caso de que no ceda el calambre se puede administrar
suero salino, para subir la tensión y los valores de sodio,
siendo la medida más eficaz ante un episodio que
no remita.
¿ Qué
hacer si aparece un calambre en casa?
Lo más importante será mantener la calma y si estamos tumbados, levantarnos para
apoyar el pie, y descontracturar el gemelo. Generalmente con esta medida suele
remitir, pero si ésto no sucediese se podría masajear la zona dolorosa hasta relajarla.
En caso que la persona se note mareo o al tomar la tensión arterial esté muy baja puede ser útil tomar algún producto rico en sal (
siempre de forma excepcional) como puede ser jamón
u otro embutido, sopas de sobre, productos precocinados, ...